domingo, 22 de marzo de 2009

A la niña que escribió la historia del sauce llorón





No daré tu nombre, niña, pero quiero dejar aquí constancia de que también en este mundillo virtual se puede querer a la gente y, yo a ti te tengo mucho cariño. Jamás me has demostrado que la edad pudiera ser un barrera para que tú y yo nos entendiéramos y hoy, desde ese entendimiento porque creo saber por lo que estás pasando, quiero decirte que el verde, el rojo, el azul y todos los colores del arco iris volverán a brillar en tu ventana. Tienes tanta vida por delante y tantas cosas bonitas por vivir que, cuando pase el tiempo, esto que te está sucediendo hoy, no será más que un puntito negro en la historia de tu vida.

Sal de las cuatro paredes y vete al mar, verás como lo ves todo de otra forma.

He escrito esto atropelladamente, pero espero haber sabido hacerte llegar mi mensaje de cariño y esperanza.

Voy a hacerle una visita a mis sauces llorones y volveré, una vez más, a recordar tu historia.

Va un beso enorme, orillita arriba, luchando contra el levante.

3 comentarios:

Bibiana Poveda dijo...

Seguro que ya me metí antes que la dedicada...
pero, sabés qué? hay cosas que una escribe (que vos escribís) que se universalizan... porque otra, como yo (a la que le encantan los sauces llorones) precisaba leer este mensajito de fuerza.
Entonces, GRACIAS,
y un abrazo por partida doble!

VICTOR VERGARA dijo...

Cada vez que se nos cierra una puerta se abren cinco. Para verlas, solo tenemos que girarnos y dejar de mirar hacia atrás -hacia la puerta que se cerró-.

Abrazo tripleeeeeeee !!!!

Anónimo dijo...

Hola! te felicito por la entrada, soy hermano de miltar(sebastian capone) de libertad8 tambien escribo y te invito a mi blog! saludos Ivan (imaginario)