Junio había comenzado como otro junio cualquiera, sin manual de instrucciones
y sin más anotaciones en la hoja de ruta que la de la cita con Hacienda.
Hacía calor la noche que dijiste:
-¡Cuidado con la tiranta!
Yo hice un ovillo con el pudor, la vergüenza y las normas y lo tiré debajo de la cama, al tiempo que amenazaba a la señora del espejo con añadirle unas cuantas lorzas más a la cintura, si lo sacaba de ahí antes de que el verano terminara.
Después habilité la casilla de la locura transitoria y me fui a vestir el mar con sábanas de raso.
Más tarde tu marcaste la del silencio y ya se sabe que a golpe de
idem no se construyen historias.
Este Junio, volverá a ser otro junio cualquiera.
8 comentarios:
Más tarde tu marcaste la del silencio y ya se sabe que a golpe de idem no se construyen historias.
Ana!!! Me encanta estar justo cuando publicás. Me siento como niña pequeña con regalo nuevo.
Este relato me dio, claro, una nostalgia de aquellas. Aún sin tener en claro (problemas con el español peninsular) qué es una "tiranta". Mas, por todo el resto... y la casiila habilitada y el junio venidero, igual que otros...
Que ya me extendí... y sólo es pá decirte, desde el aRma, que, en especial ese párrafo que transcribí, es genial.
Abrazo grande, atravesando el Atlántico!
amenazaba a la señora del espejo con añadirle unas cuantas lorzas más a la cintura
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""Después habilité la casilla de la locura transitoria y me fui a vestir el mar con sábanas de raso.""
Esto es muy hermoso. Te luces cuando te da la gana. Es prosa poética rebosante de poesía por los cuatro costados.
¡¡Aiinnss las locuras transitorias!!, y con la playa enfrente..., casi ná, jajajaja
Fuerte abrazo.
Ningún Junio es repetible, miq uerida Ana, y menos entre tus versos.
Me ha encantado este poema.
Un besazo
Marian
Bibi, una tirante es un tirante. En España se dice también tirante, pero por esta tierra mia malagueña, a veces usamos tiranta cuando se hace referencia a los de las prendas femeninas.
Gracias por tu generosidad y por estar siempre.
Un abrazo
Algo apocalíptico, me gusta. Bienvenida al fin de los tiempos.
Un saludo
La vida debiera estar llena de locuras transitorias, pero el egoísmo tiene asentados sus reales y es muy dificil que aceptemos que así sea.
Gracias Victor.
Un abrazo enorme.
Gracias Marian. Es un verdadero lujo tenerte por aquí, miles de gracias.
Un abrazo
Gracias por tu visita, Antonio.
Saludos
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